El derecho de 29 años, que el año pasado ganó el Cy Young y el premio del Jugador Más Valioso, casi se convirtió en el tercer lanzador con al menos tres nohitters en su carrera. Pero con un out en el noveno, Harrison extendió el bate y soltó un sencillo al central.
La concurrencia en el Comerica Park, que ya estaba de pie, le dio a Verlander una cerrada ovación y el derecho rápidamente remató a los Piratas con un par de rolas fáciles. Verlander completó su gema con 12 ponches y apenas dos boletos.
Mezlando una recta dura con una devastadora curva, Verlander maniató metódicamente a los Piratas durante siete innings - y entonces excitó realmente a la muchedumbre en el octavo.
Casey McGehee se ponchó sin tirarle a una recta de 98 millas por hora y Nate McLouth se fue en blanco en un lanzamiento que marcó 99 mph.
Verlander alcanzó 100 millas en el radar con su primer lanzamiento a Clint Barmes, y tras forzarle a hacer swing a una bola afuera, el as de Detroit caminó lentamente hacia el banco.
En el noveno, el estelar derecho abrió retirando a Michael McKenry en una rola al campo corto, pero Harrison siguió con una línea corta por encima del guante de Jhony Peralta.
Verlander (5-1) vio la pelota picar en lo corto del central y se dobló en el montículo, sabiendo lo cerca que estuvo de volver a hacer historia. En lugar de ello, se conformó con la sexta blanqueada de su carrera y su 16° juego completo.
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